Con intenciones de servir como medio de propulsión para un minúsculo robot que algún día viajará por el interior del cuerpo humano, ingenieros de la Universidad de Monash en Australia crearon un pequeñísimo motor que apenas mide un milímetro de largo por aproximadamente un cuarto de milímetro de ancho: el Proteus. Para que te hagas una idea, eso es menos de un tercio del grosor de un cabello humano.
El pequeño aparato está construido con un material piezoeléctrico, el cual vibra al ser expuesto a un campo eléctrico. Estas vibraciones son absorbidas por el motor y convertidas en fuerza rotacional, la cual hace girar una bola de acero inoxidable más de 100 veces por segundo. Con esa potencia, el microbot podrá avanzar por las arterias a increíbles seis centímetros por segundo, siempre y cuando vaya en dirección de la circulación de la sangre.
El Proteus lleva ese nombre en honor a la nave de la película de 1966 “Viaje Fantástico”. En la cinta, un grupo de científicos era miniaturizado y viajando en la nave debían llegar al cerebro de un científico en coma para eliminar un coágulo. Una joya de la ciencia ficción que quizás alguno de ustedes vio cuando niño. Si no, pueden ver el trailer original abajo.
Fuente: Australians build tiny motor for fantastic voyages inside humans (iTWire)